Suelen ser los más serios del clan real, pero hoy se relajaron más.
El martes, el príncipe William y Kate Middleton se dejaron ver juntos en el primer encuentro Global Ministerial Mental Health Summit, donde figuras políticas, académicos y gobernantes de todo el mundo se unieron con el objetivo de discutir los problemas alrededor de la salud mental.
Junto al príncipe Harry, el duque y la duquesa de Cambridge se concentran en años recientes en torno a la salud mental. Ellos lanzaron la campaña Heads Together en 2016, como plataforma para unir a organizaciones benéficas y luchar contra los estigmas asociados a la salud mental. El evento ocurrió oportunamente un día antes del Día Mundial de la Salud Mental.
Middleton llegó luciendo un vestido lila manga larga de Emilia Wickstead, uno que usó el verano pasado en una gira familiar por Polonia y Alemania. Esta vez, la miembro de la realeza combinó el diseño con tacones color piel y una bolsa de broche con asa.
En el evento, celebrado en el County Hall de Londres, los dos miembros de la realeza se divirtieron un poco ayudando al artista Dairo Vargas a pintar. Vargas le entregó un pincel a Kate y a William, a pesar de que los dos dudaron en participar.
"Eso arruinó el cuadro básicamente", le bromeó William a su esposa antes de burlarse de sí mismo. "Así es que se arruina apropiadamente un cuadro", dijo el príncipe, pincel en mano.
"Esto es muy valiente de tu parte", le dijo Middleton al artista. Sin embargo, ambos miembros de la realeza contribuyeron con un brochazo a la pintura, titulada "Alguien a quien acudir", inspirada por el encuentro. Vargas dijo que esperaba que otros asistentes también contribuyeran con la pintura, un símbolo de cómo cualquiera puede ayudar a atacar los problemas de salud mental.
Durante el evento, la pareja se reunió con personas jóvenes, quienes hablaron de sus experiencias con la salud mental, y aprendieron de casos de estudios de salud mental en India y Estados Unidos.
Los dos se sentaron cómodamente en el Banco de la Amistad, un proyecto de Zimbabue donde "abuelas comunitarias" o gente entrenada para ayudar a quienes sufren con problemas de salud mental, apoyan a la gente de su comunidad, escuchándolos sentadas en los bancos.
Esta no será la única aparición pública de la pareja real esta semana. Se espera que la pareja y sus dos hijos mayores, el príncipe George y la princesa Charlotte, asistan a la boda de la princesa Eugenia con Jack Brooksbank, el viernes en la capilla St. George del Castillo de Windsor.
¡Los veremos allá!