Kristen Bell, Kim Kardashian, Jennifer Lopez y otras madres famosas revelan las historias más asquerosas sobre sus hijos

Ser madre no es el trabajo más glamoroso del mundo, ni siquiera para las estrellas.

por Corinne Heller | Traducido por Vanessa Odreman | 05 oct, 2018 7:59 PMTags
Kristen Bell, EllenTube, MomsplainingEllenTube / Warner Bros. Television

Ser madre no es el trabajo más glamoroso del mundo, ni siquiera para las estrellas.

Kristen Bell está aquí para recordarte que por mucho que un padre ame a su hijo, a veces los chicos pueden ser… ¡asquerosos!

La estrella de Veronica Mars y Frozen, quien comparte dos hijos con su esposo Dax Shepard, así como otras mamás célebres como Kim Kardashian y Kelly Clarkson, hablaron abiertamente del lado no-tan-glamoroso de criar a sus pequeños, en un episodio Momsplaining, la serie de EllenTube. El viernes las estrellas hablaron individualmente sobre algunas de las cosas desagradables que han hecho sus chicos, mientras que Bell también habló de otros niños y sus padres.

"Hola, soy Kris Bell. Tuve parásitos en el trasero. Tuve. Relájense", dijo la actriz para empezar y luego habló de lo que probablemente fueron parásitos intestinales, vestida de un traje protector amarillo, lentes y una máscara, como los personajes de Breaking Bad.

"Pero no fue mi culpa", dijo. "Me los contagiaron mis hermosos y especiales hijos. De verdad, los niños son asquerosos".

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Kardashian dijo que su hija con Kanye West, North West, ahora de 5 años, una vez metió su cepillo de dientes en el inodoro antes de lavarse lo dientes.

"O podría ser comer comida de perro", agregó Kardashian.

Hablando de perros, Clarkson contó una historia sobre su hijo Remington, de 2 años, metiéndose en la popó del perro familiar.

Jennifer Lopez recordó haber lidiado con proyectiles de vómito de sus mellizos, Max y Emme, cuando eran bebés.

Pero Scarlett Johansson, quien tiene una hija, tuvo la historia más desagradable:

"Ella fue a usar el baño. De pronto, escuché algo… que algo pasó o algo así. Corrí al baño", dijo. "Había popó por todo el suelo, en la pared, de alguna forma también lo había pisado. Estaba en mis pies. También yo, de pie ahí, en shock porque lo había pisado, porque estaba sobre ella, en la pared, y ni siquiera sabía cómo había pasado, ahí llegó mi perro y se empezó a comer el popó de mi hija".