
Así fue que, según él, dejó de ser gay...
Aunque cueste creerlo, aún hay quienes persisten en catalogar la homosexualidad como un enfermedad, pese a que incluso hace 28 años la Organización Mundial de la Salud la excluyó de la lista de de Trastornos Psiquiátricos.
Peor aún, hay quienes confían en una posible cura.
Recientemente, un actor colombiano de nombre Oscar Naranjo, recordado pro haber participado en una edición de Protagonistas de Novela, reveló a través de un video de Youtube que tras años de haber tenido atracción por personas de su mismo sexo, hoy es un "Varón de Dios".
"Le dije no al homosexualismo cuando le dije ya basta diablo, no soy una mujer, soy un varón", indica Oscar en medio de su relato con el que explica cómo dejó de ser gay. "Hoy me ven con el cabello corto, hecho un varón de Dios, transformado por la gloria de Dios".
Naranjo describió el hecho de mantener relaciones sexuales con hombres lo hacía sentir "como sucio, culpable, me sentía mal, pero sin embargo la carne quería, porque cuando le abres una puerta al diablo, él se te mete".
Para explicar su pasado como gay, el actor cita un montón de parámetros sociales que nada tienen que ver con la orientación sexual, como jugar con muñecas o determinada vestimenta.
¿Realmente se puede dejar de ser gay?
El psicólogo estadounidense Joseph Nicolosi, cofundador de la Asociación Nacional para la Investigación y la Terapia de la Homosexualidad, impactó en los medios hace algunos años, llegando ser entrevistado incluso por Oprah y Larry King, tras asegurar que ser naturalmente homosexual o heterosexual no era más que una construcción social.
Por otra parte, el biólogo Alfred Kinsey, afirmaba que "el 50% de los hombres no son exclusivamente heterosexuales durante su vida". Él planteaba que las identidades sexuales de cualquier tipo son fluidas y que en cualquier momento las personas pueden cambiar su orientación sexual, por ejemplo, al estar en la cárcel.
En 2012, específicamente el 17 de mayo cuando se celebra el Día Internacional contra la Homofobia, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) advirtió que los supuestos servicios de "curación" de personas con orientación sexual distinta a la heterosexual carecían de justificación médica y representan una grave amenaza para la salud y el bienestar de las personas afectadas.