Luego de obtener el alarmante récord Guinness como el niño más gordo del mundo, el joven ruso murió a temprana edad.
Dzhambulat Khatokhov saltó a la fama en 2003 cuando medios reseñaron que había sido reconocido con el mencionado título. En ese momento, con tan solo 7 años, pesaba poco más de 100 kilos, lo que generalmente pesa un elefante bebé.
Dzhambulat siguió una carrera en el sumo, y fue precisamente la asociación de su país quien dio a conocer la noticia de su fallecimiento, a los 21 años de edad.
A través de su cuenta de Instagram, la directora de la entidad, Betal Gubzhev, lamentó la noticia y envió condolencias a su familiares, sin revelar la causa de muerte.
Mira en el video cómo lucía.
En un documental, el doctor Ian Campbell había advertido sobre los peligros que corría siendo un niño. "Su peso significa que está en gran riesgo de [contraer] diabetes, cáncer y enfermedades del corazón".
Sin embargo, su madre respondió: "Mi hijo no está enfermo, simplemente es único. Si otros piensan diferente, allá ellos".