A pocas horas de llevarse a cabo, la polémica está encendida...
A lo largo de la historia del Super Bowl, han habido muchas polémicas, casi siempre todas con respecto al show artístico del medio tiempo. Este año, muchos artistas de la talla de Rihanna o Cardi B fueron convocados para ser parte de su famoso show, pero optaron por rechazar la oferta debido a la decisión de la NFL (la liga del fútbol americano) con respecto a Colin Kaepernick, un jugador que fue marginado de los equipos debido a su ideales políticos.
El jugador afroamericano se arrodillaba en cada partido cuando se sonaba el himno nacional, como una manera de protestar en contra de los abusos contra las minorías raciales de la era Trump. Luego, tildado de "anti-patria", el ex mariscal de campo de San Francisco 49ers quedó sin ser contratado y debió enfrentarse a críticas provenientes hasta del mismo presidente.
Luego de que Rihanna rechazara la oferta, Maroon 5 aceptó ser parte del show del medio tiempo, lo que de inmediato lo hizo partícipe de la polémica: su participación fue juzgada por muchos. Incluso Roger Waters pidió que se arrodillen en apoyo a Kaepernick, a través de una solicitad que compartió en sus redes sociales y también incluyó a los raperos Big Boi y Travis Scott.
Adam Levine canceló la conferencia de prensa previa al espectáculo, pero que ellos se manifestarán a través de su arte: "No estoy en la profesión indicada si no puedo enfrentar a una pequeña controversia. Esto es lo que es. Nos encantaría seguir adelante y hablar a través de la música". Por su parte, Travis Scott aseguró haber solicitado a la liga realizar una donación a organizaciones que luchan por la justicia social para aceptar formar parte del evento.