Su llegada a la vida de Alfonso Cuarón no fue planeada, Yalitza y Nancy García (Adela en la película) son grandes amigas. Originarias de Oaxaca, las jóvenes actrices tenían otros planes siendo maestras.
Sin embargo, luego de graduarse las oportunidades de trabajo fueron mínimas. Un día, Nancy se enteró de que estaban haciendo un casting para una película y le pidió a Yalitza que la acompañara, pero Aparicio no quería, pero terminó audicionando. Aunque para ella era slo un juego, a los directores de casting les llamó mucho la atención su manera de desenvolverse, sobre todo la complicidad que tenía con Nancy.
El siguiente paso fue viajar a la Ciudad de México para conocer al director.
Durante su participación en el Festival de Cine de Morelia, ambas confesaron que no tenían idea de quién era Cuarón, ni del gran momento que estarían por vivir.
El ganador del Oscar les pidió improvisar una de las escenas y no dudó en darles los papeles de Cleo y Adela. En palabras de Yalitza, desde el día uno, el mexicano las trató como un padre, les tuvo mucha paciencia y las guió en este camino que les cambió la vida por completo
Su trabajo en ROMA le ha llevado a ser nombrada una de las mejores actrices de 2018 por The New York Times, así como a protagonizar la portada de Vogue México, obviamente sin olvidar que es la segunda mexicana (después de Salma Hayek) en ser nominada como Mejor Actriz en la historia de los Oscar